martes, 31 de agosto de 2010

Buscar en Google: Guapo García

Armé este relato para tratar de memorizar los autores de ciertos tangos que son de mi agrado. Como verán, fue una tremenda estupidez. Con el tiempo llego la era de la computadora y junto a ella, un nuevo verbo: googlear.

Soy el guapo García y vivo solo en este departamento desde el maldito día que mi china me dejo, "Pero pa´ que te voy a contar" de Sciaraffia. ¡A ver si la terminan con semejante "Cambalache"! de Discépolo. Pero, es de no creer. En estos edificios modernos no existe el más mínimo respeto por el prójimo. Estaba "A media luz" de Donato y Lenzi, reposando en "La catrera" de De Bassi y así como "Entre sueños" de Aieta y Polito escuche un grito ensordecedor que perturbaba una vez mas mi "Sueño de juventud" de Discépolo. Se escucha de afuera: ¡"Adiós muchachos"! ¡Saludos!
De Sanders y Vedani el primero y de Domingo Federico el segundo. Pero que barbaridad, ni siquiera en "Mi refugio" de Córdoba y Cobián puedo descansar tranquilo. Yo ya le había dicho a "Grisel" de Mores y Contursi antes de comprar en "Corrientes y Esmeralda" de Pracánico y Flores, "Araca corazón" de Delfino, no te emperres con este bulo que el de la inmobiliaria tiene cara de "Pura trampa" de Polito, Lázzari y Dragone. Seguro que "Mi Buenos Aires querido" de Rodríguez, Maroni y Contursi tiene un lugar ideal para nuestro nidito de amor. Pero ella no me quiso escuchar, el departamento le pareció "9 puntos" de Canaro, es mejor decía que el de "Boedo" de Julio de Caro y mas grande que el de "El once" de E. Y O. Fresedo. Y ahí nomás pelo el billete y firmo con "Tinta verde" de Bardi el boleta de compra. Eso fue nuestro fin, fue como clavarme "La puñalada" de Castellanos y Flores. Como va a vivir un guapo en un departamento. Si yo siempre había soñado con vivir en "La vieja Recova" de Sciamarella y Cadícamo, o como "Canaro en París" de Scarpino y Caldarella.
Se escucha de afuera: "!No vuelvas María" sin "El choclo" eh..¡"
De Larenza y Castillo uno y de Discepolo, Catán y Villoldo el otro. Pero por favor, pueden dejar de chamullar a los gritos. Que barbaridad.
Todavía recuerdo mi bulín de la calle Ayacucho, como olvidarlo, lo tengo en mi memoria como si fuera hoy, era ahí en Ayacucho al..., bueno, Ayacucho y ¿Cómo es la que corta Ayacucho? Bueno, era en Ayacucho. Si abre amurado percantas en lo mejor de sus vidas. Allí un día la lleve a "La morocha", que "Elegante papirusa", era como un "Sueño de juventud", nos entreteníamos jugando al "Gallo ciego", siempre terminábamos igual, yo me hacia el "Pasional", fingía "Un tropezón" y "Derecho viejo" le manoteaba "La cachila", y ella enojada me decía: "Pare la mano guapo, primero hay que saber sufrir, después amar, después partir y después andar sin pensamientos...." y se iba. Y me dejaba solo con los fueyes bien inflados y "Milonga triste" pensando "El día que me quieras" inflando la "Muñeca brava" que nunca me falla.

sábado, 28 de agosto de 2010

A mi padre



No hay magias ni misas. No hay fuego. Ritual.
Lo real, otra vez, invulnerable.
Ni las medicinas. Casera. Oriental.
Lo que se dice comúnmente incurable.

Pero aún mi ojos, pueden ir al mar.
Y allí estas tan sano y amable.
Así no habrá hechizo, ni transplante, ni Diós
que te estirpe de mi corazón.


Jorge Albella
Buenos Aires, Diciembre 15 de 2008

jueves, 19 de agosto de 2010

Mi niña (Mariposas)

Mi niña se adelanto a la primavera.
Su vergel reparte flores… si usted la viera.
Su madre le ha murmurado las mariposas.
Y yo… que más, feliz. Ambas hermosas.

Mi niña ahora es capullo del origen,
Codicia de la vida, brote y remozo.
Ensueño de su madre y mi retoño.

Mi niña va desenredando su madeja.
Su estambre se hizo seda… si usted la viera.
Su madre, tejiendo miel, la ha acompañado.
Y yo… que más, feliz. Tejo a su lado.

Jorge Albella
Agosto 2010